Nacemos destinados a morir ¿Que finalidad tiene la vida? La unica y cruel de dejar que nuestro amor florezca, junto con todas esas sensaciones que nos convierten en personas, para arrebatárnoslo en el momento menos oportuno y fugaz. Nacemos con un fin desvelado, con un fin revelado, con un fin frio y fugaz. Nacemos destinados a separarnos de nuestros seres queridos. Una vez, no recuerdo cuando, conocí a alguien a quien admiré por mucho tiempo. Y hoy, hoy su destino ha llegado. No se expresar cuanta rabia escondo dentro, cuanta ambición perdida al recordar que como todo lo que florece en esta vida me marchitaré con un destino que comparto con todo ser vivo. Morir. Una palabra a la que no le tengo miedo ni rencor.
Así que, aquí bajo esta tenue luz que me ilumina, intento ordenar todos mis pensamientos acerca de la vida y la muerte, palabras tan contrarias y parecidas a la vez ¿Puede ser la vida más cruel? Tengo que empezar a comprender ese término que todos aceptamos desde pequeños, que tenemos fin, algo que yo creí poder evitar al sentirme inútilmente especial. Solo quiero comprender, con que finalidad he nacido, o si simplemente seré otra pieza sin importancia en el juego de la vida. Ahora que nacemos, solo podemos esperar a nuestro final con los brazos abiertos, ¿verdad? Simplemente es algo que no puedo dejar de pensar, y menos hoy, porque hoy, 19 de febrero, el destino le ha llegado. Así que vida, no te tengo ningún aprecio...Y muerte, simplemente te espero...
